Por Dalivor Eterovic
Se va un ministro y también una ministra y otro y otra y, uno después de un año en el cargo, otros después de un mes y también dos en una semana.
Así las cosas es dable pensar que nos son los ministros y ministras, el problema.
Si además consideramos que esto ocurre en un periodo de crisis sanitaria, transformada en profunda crisis social, económica y política es aun más evidente que quien lidera el gobierno, designa e instruye al gabinete de ministros, es parte principal del problema.
Es el presidente Piñera el principal responsable de lo que ocurre en el país, no son los ministros ni las ministras que viven en la nube. No es el COVID, ni mucho menos el estallido social que el propio Piñera mando a reprimir con disparos a los ojos.
Lo que digo no es novedad y es sabido de sobra por gran parte del pueblo de Chile, sin embargo, este diagnóstico por tantos compartido, debe tener una expresión en lo político, de otro modo no se entendería que todo un pueblo pueda ser capaz de soportar tanta injusticia, dolor, indolencia e improvisación, sin que nada ocurra y que la elite política, encargada de velar por la famosa institucionalidad y el estado de derecho, se limite a poner cara de cordero degollado, enviando mensajes de solidaridad y apoyo a la señora María.
Si los acuerdos insuficientes ya nos los suscriben, sino quienes ven en ellos una tabla de salvación en este naufragio consumado.
Si la cantinela de la caridad gubernamental no tiene efecto real en los problemas sociales.
Si las organizaciones sociales, demuestran ser más eficientes y eficaces que el propio gobierno.
Si los alcaldes de la propia derecha no logran entender qué pretende su gobierno.
Si el empresariado que levantó y financió a Piñera, y que antes solo se sonrojaba al escucharlo, ahora lo rechaza, porque ya no solo habla estupideces y delinque, sino que ahora les genera cuantiosas pérdidas y además proyecta una recesión nacional muy profunda.
Si todo esto y mucho más está pasando y solo se percibe una permanente crisis política interna. Un permanente tironeo entre los duros de la derecha y los otros.
Pero por sobre todo este macabro circo, si lo mas desgarrador es el sufrimiento del pueblo, el hambre, la indolencia gubernamental, la necesidad de todo tipo que están sufriendo trabajadores y trabajadoras, por el simple hecho de serlo. Porque para el presidente de la república y los suyos es un asunto de principios. Solo el capital importa.
Entonces solo resta insistir, como lo hicimos a fines del 2019, si es necesario que Piñera de un paso al costad, que lo haga.
Ya lo salvaron una vez, cuando el propio pueblo lo tenía en las cuerdas. Chile sabe quiénes lo salvaron. Chile sabe quiénes firman acuerdos, literalmente, trasnochados.
Hoy el pueblo que sufre no solo demandará que se vaya, es necesario que dé un paso al lado y con él, todo un sequito de dinosaurios neoliberales. Asunto más complejo que seguramente será materia de “negociación o acuerdo”.
La derecha solo sabe usufructuar del esfuerzo ajeno, solo sabe maquillar cifras, solo sabe inventar realidades paralelas, ocultar muertos, culpar a otros y utilizar la fuerza en contra de las mayorías.
Nace decir…¡¡ Ándate Piñera.!!.
Pero lo correcto es decir, que la institucionalidad funcione y que el parlamento, si algo de dignidad tiene, lo saque, motivos sobran y el camino existe.
Dalivor Eterovic Díaz
Presidente.
PC Magallanes.