Por José Luis Córdova
Conversando con los panelistas del programa «Primera Línea» de Radio Nuevo Mundo Patagonia, el diputado Hugo Gutiérrez afirmó que el actual proceso por una nueva Constitución se pactó en el Parlamento en el marco de la actual Constitución pinochetista, pero que «con un triunfo arrasador del Apruebo se abren posibilidades de un verdadero proceso que convoque a una Asamblea Constituyente real».
«La derecha sabe que el Apruebo va a ganar y por eso no quiere que mucha gente vaya a votar y por ello difunden la idea de que no va ser seguro el plebiscito del 25 de octubre. La situación se parece mucho al plebiscito del 88 cuando teníamos miedo a las bayonetas, ahora tenemos el miedo a la pandemia Siempre tenemos el sino de vencer al terror, al temor. Pero la gente tiene que saber que se tomarán todas las medidas para que sea seguro..
«A la derecha no le gusta el proceso constituyente como se está estructurando, quisiera minimizarlo más. El 1% de chilenos y chilenas privilegiados que han tenido el Estado a su disposición andan buscando alternativas. Ellos quieren mantener sus privilegios y tienen a su favor esta cultura neoliberal que ha permeado en estos años y también tienen a las fuerzas armadas a su favor. Dos grandes poderes que son muy poderosas y a eso unir que ambos poderes persuaden a algunos sectores por la subjetividad y también a través del miedo».
«Nosotros tenemos que convencer a la gente que va a ser seguro aunque no hay garantías que la gente no se vaya a contagiar, como ha dicho el presidente del Servel. La derecha se las va a ingeniar para sacar miles y miles de casos para persuadir a chilenas y chilenos que no vayan a votar. Ese es el juego de ellos. Un sector de la centro izquierda también plantea que no es bueno que vaya mucha gente a votar porque no quieren que este proceso se vaya a destructurar. Ellos quieren este proceso constituyente que les da garantías de gatopardismo, es decir que «todo cambie para que no cambie nada», agregó el parlamentario del PC.
«Este es un proceso lleno de trampas, un territorio minado, donde se pone el pie puede explotar una bomba. Tenemos que ir con cuidado y legitimarlo, aunque se gane por un voto quiere decir que queremos una nueva Constitución. El tema es el plebiscito de salida -que es obligatorio- y si los 2/3 operan como candado, si la Constitución que se presente no es la que el pueblo quiere, la gente puede votar en contra y si se rechaza el nuevo texto, queda vigente la actual Constitución de Pinochet. Para ello tiene que votar mucha gente para no deslegitimar la decisión del pueblo que no aceptará retornar a la Constitución fascista aunque la derecha diga que votó poca gente.Si la gente elige no ir a votar, por la abstención nos puede pillar. La abstención es un aval para la Constitución de Pinochet», afirmó Gutiérrez.
«La ciudadanía se ha expresado con claridad en la calle por una Asamblea Constituyente, hoy estamos en el marco de un acuerdo en el Congreso que aceptó modificar la Constitución. No es un proceso constituyente sino constitucional porque al final del día es el Parlamento el que avala este proceso constitucional, no constituyente. Es la actual constitución la que permite el funcionamiento de una convención constitucional o mixta, con un 50% parlamentarios y 50% pueblo», aclaró el diputado. «Si vota una mayoría significativa -unos 10 millones de los 14 con derecho a voto- podría conformarse una Asamblea Constituyente absolutamente legitimada para, en verdad, construir una nueva Constitución Política del Estado», añadió.
«Nosotros creemos en las correlaciones de fuerzas y trabajamos para construir una correlación de fuerzas favorable a los intereses que representamos, mientras la derecha construye correlaciones para defender sus intereses. Si el 25 de octubre se logra construir un electorado a favor , los tiempos constitucionales pueden cambiar. Como todos saben lo que eventualmente podría ocurrir si hay una mayoría arrasadora -con una brecha gigante entre los que aprueban y rechazan- ahí mismo estaríamos sepultando la Constitución de Pinochet y se abre un camino distinto. Hasta dónde podremos llegar va a depender el pueblo movilizado y eso va más allá del Parlamento chileno -que ha sido superado», indicó
«Este Parlamento ya también superó al poder ejecutivo. El ejecutivo hoy es una frágil figura decorativa en Chile. Piñera sólo se está amparando en la fuerza bruta, por eso ha fortalecido todo el sistema de inteligencia, militar, policial y de seguridad.. No resuelve nada. Estamos legislando cosas que de acuerdo a la Constitución vigente no podrían legislarse, El 10% obviamente que se aprobó a contra pelo de la Constitución de Pinochet. Nosotros estamos empoderados porque sabemos que la gente quiere las cosas que estamos haciendo», expresó Hugo Gutiérrez.
«La asamblea Constituyente tiene que continuar siendo un desafío. No podemos ser sorprendidos por un nuevo estallido social , que el movimiento vaya más allá si nosotros nos alineamos con un proceso como el que está.Si podemos profundizar este proceso constitucional y nos conduce a un proceso constituyente para una Constitución participativa y democrática verdadera, bienvenido sea. Tuvimos que aprender el estallido social y hacernos la autocrítica -yo me la hice al día siguiente- si me siento representante, tengo que estar en la calle. No hay otra», añadió.
«Algunos creen que a través de la Constitución se pueden solucionar muchos problemas, pero se puede hacer sobre algunos temas relevantes. Estamos en vísperas de celebrar los 50 años del triunfo de la Unidad Popular, un proyecto político de construcción del socialismo, por vía pacífica. Ya entonces había claridad que una nueva Constitución debía estar cimentada en las trabajadoras y trabajadores Hoy vemos la nueva Constitución como un catálogo de derechos que efectivamente no tenemos, pero ello no basta si no va acompañado de ciertos requisitos, como la recuperabilidad del Estado. El Estado de Chile lo puso la dictadura a disposición de la oligarquía para quién precisamente dio el golpe».
«¿Cuál es el esfuerzo que tenemos que hacer en esta nueva Constitución? Un esfuerzo entre chilenas y chilenos para recuperar el Estado para el pueblo. Hablamos de recuperar los recursos naturales que perdimos; vamos a recuperar las empresas del Estado, si no lo hacemos, no vamos a ser capaces de generar empleos y vamos a seguir sujetos a la empleabilidad privada, lo que significaría que la oligarquía continuaría con el poder. Es fundamental resolver el problema de la matriz productiva. Ellos han construido sus riquezas con los recursos naturales de todos los chilenos y con la empresas que eran del Estado de Chile. Para satisfacer las justas necesidades de salud, educación, vivienda, previsión y otros debemos contar con los recursos naturales y las empresas del Estado Todo el pilar contributivo chileno está basado en el IVA, que es el impuesto que pagan los pobres.Y los ricos no pagan, entonces el negocio es redondo, eso es lo que hay que cambiar».
Hugo Gutiérrez comentó que «la oposición es frágil porque un sector concuerda con los intereses hegemónicos y estratégicos del gobierno y de la derecha. Y también hay una oposición socialdemócrata que no quiere radicalizar los procesos, sienten que están cómodos como están, aunque no concuerdan con la Constitución de Pinochet y quieren «humanizar el capitalismo».
«La derecha se está preparando -añadió- hay una militarización del estado neoliberal, formas solapadas de golpismo como en Brasil, en Ecuador, en Argentina. La derecha no va a aceptar fácilmente ser derrotada, se va a intensificar la lucha de clases. Hay que destructurar el Estado chileno y terminar con las figuras unipersonales, como los presidentes, los papas, los reyes. La gente, el pueblo quiere participar más activamente. La nueva Constitución tiene que ser un cambio en las reglas del juego que habiliten el juego democrático», concluyó el parlamentario PC.